Música y poesía, homenaje a Gabriela Mistral

Los organizadores del homenaje de la música chilena a Gabriela Mistral, presentaron el contenido del concierto como “Cantos de amor mistralianos”. Esta descripción, sin embargo, no refleja plenamente el significado del emotivo programa realizado en el Instituto de Chile hace unos días. Fueron ocho poemas musicalizados por siete autores, entre los cuales se contaban cuatro Premios Nacionales, además de la propia Gabriela Mistral. ¿El motivo? Los 130 años del nacimiento, en 1889, de la poeta, Premio Nobel de Literatura.

En el concierto se mostró como más de un poema fue tomado por distintos músicos, lo que permitió -a través de la interpretación de la soprano Paulette L’Hussier y la pianista Patricia Castro- que se apreciaran distintos matices y sensibilidades de los compositores.

María Luisa Letelier, académica de Bellas Artes, explicó que la presentación pretendía “adentrarse en lo profundo de nuestra creación artística, indagando y sacando a la luz cómo la poesía de la gran Gabriela ha inspirado a nuestros músicos, de distintas edades y épocas, para expresar en música los sentimientos que su poesía representan para cada uno de ellos”.

“Gabriela -señaló María Luisa Letelier- en carta a Alfonso Letelier, su padre, quien le pedía autorización para escribir una obra con los textos de los Sonetos de la Muerte, con la modestia de los grandes genios, escribió: ‘soy en música tan ignorante, que no paso del atrio del templo, lugar de los vagabundos y peregrinos’. Creo que con este programa trataremos de hacer ver a Gabriela que ella está mucho más adentro del templo de la música de lo que ella creía, y además, dentro del templo de los corazones y sensibilidad de los creadores musicales”.

En la ocasión, Juan Antonio Massone, de la Academia Chilena de la Lengua, hizo una breve exposición sobre los poemas de Gabriela Mistral. Y, en seguida, se interpretaron las obras de Ema Ortiz (1912-2000) sobre la base de los poemas “Meciendo” y “Rocío”; de Carlos Guastavino (1912-2000) ,“Meciendo” y “Encantamiento”; de Alfonso Letelier Llona (1912-1994) Premio Nacional 1968,  “Balada” y  “Suavidades”; de Edgardo Cantón (1963) “Balada”; de Pedro H. Allende (1911-1954) Premio Nacional 1945, “Mientras baja la nieve”;  de Alfonso Leng (1884-1974) Premio Nacional 1954, “Cima”; y de Federico Heinlein (1912-1998), Premio Nacional 1975, “Meciendo” y “Dame la mano”.